sábado, 10 de octubre de 2015

¡No me arrepiento de nada!



¿Es una suerte o una desgracia no arrepentirse de nada? ¿Si existiera una máquina del tiempo no tendríamos la tentación de viajar por él para cambiar algunas cosas?

Cuando alguien dice que no se arrepiente de nada sobre las decisiones que ha tomado a lo largo de su vida, realmente, ¿está siendo sincero? ¿O es que lo dice porque es imposible volver atrás en el tiempo?

Siempre que podemos intentamos arreglar lo que hemos hecho mal. Buscamos caminos alternativos a decisiones que consideramos equivocadas para enmendar el rumbo que va tomando nuestra vida. Pero, si nos preguntan, ¿te arrepientes de algo? La mayoría contesta: "por supuesto que no, volvería a hacer lo mismo una y mil veces más". Realmente somos sinceros o se trata de un arrebato de soberbia porque nos parte el alma reconocer que nos equivocamos. ¿Acaso la experiencia de la vida no tiene ningún valor?

Siempre que puedo vuelvo a ver la película "Regreso al futuro". Es increíble como la alteración de un pequeña detalle del pasado puede tener consecuencias inimaginables en el futuro. La posibilidad de utilizar una máquina para viajar en el tiempo y alterar el curso de los acontecimientos e incluso de la historia de la humanidad, es realmente fascinante. Por lo menos para mí.

Entonces, me pregunto: ¿es posible que existan personas que no cambiarían ni una decisión de las muchas que han tomado en su vida? Si la respuesta es sí, ¿es que quizás algunos han alcanzado tal grado de perfección en su evolución emocional que pueden afirmar eso?

A mi me encantaría tener esa máquina del tiempo. No es que pretenda cambiar toda mi vida y la de los que me rodean, pero algunas experiencias las llevaría por otro camino. Es una pena no poder vivir una segunda vez para utilizar nuestra experiencia de vida porque cuando tienes la suerte de vivir muchos años, y has podido aprender algo de las emociones que envuelven nuestro comportamiento, llega la muerte y acaba con todo.

Para mí vale la pena arrepentirse de lo que uno considera que se podría haber hecho mejor porque, aunque no tenga solución, te permite ver que hay maneras diferentes de hacer las cosas y, por tanto, de gestionar mejor nuestras emociones.

Copyright © 2015 Literatumas: blog literario de Martín Lapadula


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